jueves, 10 de febrero de 2011

CUBANOS EN PUEBLA

CUBANOS EN PUEBLA (SUGERENCIAS PARA UN ESTUDIO)

Luis Ángel Argüelles Espinosa (laes49@yahoo.com)

Nota de presentación

Cuba ha sido, a partir del triunfo de la Revolución en 1959, motivo de interés para los mexicanos. El año de 1961 (invasión de Playa Girón, declaración del carácter socialista del proyecto cubano) resultó un tipo de parteaguas en la historia política de México, y particularmente de Puebla. Desde esos años, la Revolución Cubana ha sido (y continúa siendo) venerada por unos y cuestionada por otros. Las recientes medidas económicas anunciadas por el presidente cubano Raúl Castro en el año del 2010 (despido de medio millón de personas del aparato gubernamental y liberalización de algunas actividades económicas antes prohibidas) son vistas fuera de Cuba desde diferentes ópticas: para algunos es “más de lo mismo” por lo que no resolverán ningún problema social, para otros constituye una imperiosa necesidad para el desarrollo del país. Algunos creen que es un tipo de “muerte” del socialismo cubano

Por otro lado, resulta comprensible que toda revolución o crisis económica aguda provoque emigración. Tanto los intereses afectados como la incertidumbre del futuro o cancelación de las esperanzas en su tierra natal constituyen buenas razones para que las personas emigren a otros lugares a realizar sus sueños, los cuales no siempre se cumplen, pero, al menos, se intentan.

Cada emigración específica (cubana, mexicana, dominicana, etc.), en un lugar y tiempo determinados, posee un conjunto de características particulares que la desmarcan de las demás. ¿Cuáles son esas características de la comunidad cubana actual en Puebla? Para responder a esta pregunta se presentan varias sugerencias para el estudio.

En verdad, el presente texto es parte de un protocolo de investigación en torno a un estudio histórico-sociológico sobre la emigración cubana en Puebla. Por distintas razones, el estudio no ha sido posible, pero el autor estima conveniente la publicación de estas sugerencias ya que acaso puedan aportar elementos o pistas para futuros investigadores.

El proyecto es bastante ambicioso (así se concibió y estructuró) pues incluye aspectos migratorios, de identidad, vínculos con Cuba y aportaciones al desarrollo del estado de Puebla. Para recabar los datos, se elaboraron los instrumentos de investigación[1] (cuestionario y guía de entrevista) y se preparó un índice tentativo. Si bien el proyecto es extenso, el tema o problemática dista de estar agotada. Por ejemplo, otros proyectos podrían recoger las opiniones de estos emigrados sobre aspectos de la política o realidad cubana, o de la vida mexicana o de precisar sus logros o fracasos en la tierra mexicana, o las dificultades con las expresiones o modismos mexicanos, entre otras cuestiones.

Como se observará, existe mucha tela por donde cortar y cada investigador deberá ajustar las temáticas a sus objetivos o necesidades. El presenta artículo está dividido en tres secciones básicas: Introducción, Objetivos e Hipótesis. La introducción aborda el planteamiento del problema y su justificación teórica. Los objetivos (general y particular) delimitan los propósitos del estudio y precisan sus alcances. Las hipótesis (una matriz y once subsidiarias) son suposiciones o explicaciones anticipadas de los fenómenos y es la parte más sugerente del presente texto y la que motiva la publicación de estas propuestas.

I)- Introducción

Puebla (al igual que México) es un estado que posee los tres tipos básicos de migrantes: emisores, receptores y de tránsito. Si bien el estado (como la nación en general) se caracteriza por ser una región de emigrantes, no es menos cierto que en su territorio se ubican (de modo creciente) comunidades poblacionales procedentes de distintas partes del mundo. Y es que Puebla no puede escapar del proceso globalizador y de sus diversos efectos socioculturales.

Por otro lado, los inmigrantes mantienen, en mayor o menor medida, vínculos diversos con su país de origen. Los niveles de interconexión sostenidos entre el lugar de origen y de destino del migrante ( bien a través de viajes periódicos, teléfonos, correos electrónicos o fax, entre otros) resultan tan significativos que ya desde los años 90 algunos autores comienzan a manejar términos como “identidad trasnacional”, “transnacionalismo migratorio” o “comunidades transnacionales”[2] ¿Qué significa esto? Esta nueva situación viene a confirmar el viejo postulado de Heráclito de que todo cambia o se mueve, y que los cambios alcanzan, por supuesto, a la cultura de los propios emigrantes. La cultura no es algo inmóvil o petrificado, sino es dinámica y cambiante.

El estudio de las comunidades migratorias aporta datos importantes para entender no tan sólo cambios sociales y económicos (tanto en los lugares de origen como de destino) sino también los cambios culturales e identitarios. Según el Censo de Población y Vivienda de INEGI (2,000), en Puebla existen 11, 527 personas que nacieron en otro país. Si bien esta cifra es escasa en relación con el total de la población del estado (5, 076, 686), aquella cifra duplica la del censo anterior de 1990, lo cual ya resulta significativo y anuncia una tendencia a la alza. Lamentablemente, los resultados de los censos[3] no precisa el país de nacimiento del emigrante internacional, ya que lo engloba en una categoría general (“En otro país”). Ahora bien, en el estado de Puebla (según el censo del 2,000) existe un número significativo de población (161, 716 personas, lo que asciende al 3.19% del total de la población estatal) que no especifica su lugar de nacimiento. Aquí es posible conjeturar que, al menos, una determinada parte de esta alta cifra corresponde a personas nacidas en el extranjero, pero por temor a represalias o conflictos con el Instituto Nacional de Migración no quiere revelar su país de origen. Pero nosotros nos apoyaremos en los llamados “datos duros”, las cifras que aporta el organismo mexicano.

Un mero recorrido por la ciudad de Puebla (o, incluso, una simple hojeada al Directorio Telefónico) muestra con fuerza las diferentes manifestaciones del proceso globalizador: centros y plazas comerciales, cybercafés, escuelas de computación e inglés, establecimientos de telefonía celular, de sistemas de cable por televisión, agencias de coches, entre otras.[4] Aquí debemos incluir (aspectos que están vinculados con nuestro objeto de estudio) los centros de recreación o esparcimientos de los residentes extranjeros en nuestro estado. En el caso de los cubanos en Puebla tenemos algunos establecimientos comerciales donde se combina la música, el baile y las bebidas cubanas: la Casa del Mojito, Aché, La Cabañita Cubana y el Son Montuno de Marlén. En estos lugares se encuentran personas procedentes de Cuba (bien como músicos, cantantes, preparadores de bebidas, etc.) que expanden la cultura cubana. Por tanto, puede plantearse que la emigración no es sólo cuestión de personas que se trasladan físicamente de un país a otro, sino también entrecruzamiento de culturas.

Pensamos que las grandes ciudades (como Puebla) serán, cada vez más, impactadas por la globalización, incrementándose los procesos migratorios, por lo que devendrán más cosmopolitas, no sólo en su arquitectura, sino también en sus poblaciones. Así, lo diverso y lo múltiple serán, paulatinamente, rasgos de la identidad poblana.[5] Y la multiplicidad, según nos recuerda Deleuze, no es sólo “eso compuesto de muchas partes, sino también aquello de diversos pliegues

¿Por qué y para qué un estudio sobre los cubanos en Puebla?

El hecho de que el autor de este estudio sea un cubano-mexicano (residió en Cuba hasta 1996 y hace 14 años que vive en la ciudad de Puebla y que tiene familia en ambos países) le permite poseer experiencia propia en torno a los distintos procesos (migración, identidad, adaptación, vínculos con la tierra natal, etc.) que acompañan a la persona que se traslada de un país a otro. Parafraseando al pensador cubano José Martí (quien expresaba que la vida de una persona copia, en cierta medida, la vida de una nacionalidad) la vida de un migrante copia, de algún modo, la vida de todos los migrantes de una determinada nación. Precisamente, con el presente trabajo se pretende detectar y analizar las semejanzas y diferencias que deben existir entre los residentes cubanos en esta ciudad de Puebla acerca de los procesos antes mencionados. A partir de las experiencias individuales se intentará precisar tendencias u orientaciones generales de esta comunidad.

Ahora bien, aparte de las motivaciones individuales del autor antes mencionadas, el estudio se propone no solo reflexionar críticamente sobre el tema, sino también, en la medida de lo posible, intentar modificar o transformar el problema. Es decir, la investigación responde a determinadas necesidades. ¿Cuáles son ellas? En primer lugar, contribuir a que los lectores de este trabajo (así como los oyentes de nuestras charlas) tomen conciencia de los problemas que aquí se plantean en cuanto a migración, identidad, integración y aportes a la sociedad. Nos interesa mucho resaltar la idea de que mientras más se profundiza, se conocen y respetan las diferencias individuales o particulares (ya sea de una persona como de una comunidad) más se defiende la igualdad de todos los integrantes de la especie humana. De aquí que defender los derechos de una comunidad de migrantes en México (en este caso, la cubana) es también defender los derechos de los mexicanos en el exterior y de los migrantes a nivel mundial. Todo tiene que ver con todo. Debido a la globalización y el avance tecnológico, los problemas de una migración particular influyen en las otras comunidades migratorias. Un ejemplo bastante reciente de estas conexiones puede ejemplificarse en los casos de Cuba y México. En el verano de 1994 tuvo lugar en La Habana la llamada “Crisis de los balseros” en que el gobierno cubano, ante la crítica situación interna del país, agudizada por la anterior caída del bloque socialista, permitió la salida de decenas de miles balseros cubanos con rumbo hacia los Estados Unidos. La llegada masiva de los nuevos migrantes cubanos (sin los controles necesarios) provocó un mayor rechazo o aversión de los ciudadanos norteamericana a los migrantes en general, entre ellos, a los mexicanos que son mayoritarios en distintos estados de ese país. Tales fueron los problemas sociales creados por esa situación migratoria que el entonces presidente norteamericano Bill Clinton llamó al presidente mexicano en aquel momento, Carlos Salinas de Gortari, para que sirviera de mediador con, en aquel tiempo, presidente cubano Fidel Castro. El acuerdo alcanzado hizo que la migración cubana se detuviera, con lo cual respiraban mejor las tres partes. Por cierto, en la actualidad se conocen las versiones de los tres líderes antes mencionados sobre este conflicto de 1994, lo cual permite que podamos arribar a nuestras propias conclusiones.

Ahora bien, señalamos que no sólo se intenta describir o explicar un fenómeno, sino también, en la medida de lo posible, cambiarlo o modificarlo. ¿Cómo hacerlo? Pensamos que las propuestas que se desprenderán de este trabajo serán presentadas ante las autoridades correspondientes (Presidente Municipal y Gobernador del Estado) para que reconozcan los aportes o contribuciones de la comunidad cubana en Puebla y no sólo se tenga la idea equivocada de que los cubanos causan problemas a las autoridades al estar viviendo de forma no legal en la ciudad de Puebla. Estimamos que las autoridades anteriores deben apoyar (en coordinación con las diferentes comunidades de extranjeros asentados en el estado) la celebración del Día del Inmigrante (que ya está instituido pero no se le da el realce necesario) y que en un lugar abierto (Zócalo o Atrio de la Catedral de Puebla) las distintas comunidades de extranjeros residentes en el estado puedan exponer muestras de su cultura (comidas típicas, bailes, discos de música, libros, vestidos, artesanía, etc.) de modo que se conozcan mejores sus expresiones artísticas y se posibilite una mejor convivencia. En ocasiones, se discriminan, consciente o inconscientemente, a los que no son de una comunidad y poseen costumbres distintas. Por ello, todo lo que tienda a la convivencia, ayuda. Tenía mucha razón el escritor español Pío Baroja (1872-1956) cuando señalaba que el nacionalismo es una enfermedad que se cura viajando. Por supuesto, se estaba refiriendo al ultranacionalismo o al nacionalismo mal entendido donde subyace la idea de que sólo nuestro grupo es el mejor y los extranjeros no sólo son diferentes, sino también inferiores. Con la globalización creciente de nuestros días, para conocer personas nacidas en otras latitudes, ya no es necesario viajar al extranjero. En las grandes ciudades (y Puebla lo es) existen importantes colonias de ciudadanos procedentes de otros países que están en permanente contacto o diálogo con los personas originarias u oriundas del lugar. ¿Para qué buscar afuera lo que tenemos dentro?

II)- Objetivos

El objetivo general de esta investigación consiste en elaborar una caracterización de la comunidad cubana residente en Puebla de modo que puedan mostrarse sus rasgos distintivos, los cuales marcan la diferencia con otros grupos de extranjeros radicados en el estado. Para responder a este objetivo general, se propone un conjunto de objetivos específicos, a saber: primero, precisar determinados aspectos migratorios de esta comunidad (cuándo, cómo y por qué se establecieron en esta ciudad); segundo, determinar qué tipos de cambios ha sufrido su identidad (si pérdida de identidad o identidad enriquecida); tercero, detectar cuáles son los vínculos que mantienen con su tierra nativa (remesas, envío de medicinas, ropas, etc.); cuarto, especificar cuáles han sido sus problemas para la plena integración al nuevo entorno (familiar, laboral y comunitario) y, quinto, detallar cuáles han sido los aportes o contribuciones más relevantes de esta comunidad al desarrollo sociocultural del estado de Puebla (en áreas como la ciencia, la cultura, el deporte, entre otras).

III)- Hipótesis

Ya que el estudio aborda distintas áreas, se considera de interés incluir un conjunto de hipótesis. La función de dichas hipótesis es explicativa. Los resultados de la investigación se encargarán de ratificar o rectificar estas explicaciones tentativas. Si las pruebas o datos son a favor, la información sobre los fenómenos se enriquece. Si, por el contrario, las evidencias son en su contra conoceremos nuevas facetas de esos fenómenos, lo cual lo hace aún más interesante. Este análisis postula varias hipótesis: una matriz y once subsidiarias. Es preciso decir que dichas hipótesis no surgen del vacío, sino que se apoyan tanto en la experiencia de su autor (cubano radicado en Puebla desde febrero de 1996) como de algunos cubanos que han relatado sus vivencias a quien escribe. No obstante, reiteramos una vez más, los resultados finales confirmarán o no estos supuestos.

Hipótesis matriz

En cuanto a la hipótesis matriz se postula que la mayor parte de los cubanos residentes en Puebla poseen seis características básicas: Primera, se establecieron, fundamentalmente, en la década de los noventa, razón por la cual tienen un estatus especial: pueden visitar la tierra nativa. Segunda, las causas de su migración fueron tanto económicas como políticas, si bien la mayoría de ellos sólo reconocen las primeras. Tercera, los cubanos se sienten orgullosamente como tales, aunque en su identidad se han producido cambios significativos, por lo que puede hablarse tanto de una mexicanización del cubano como de una cubanización de los mexicanos de su entorno. No existe pérdida de identidad, sino identidad enriquecida. Cuarto, los residentes cubanos ayudan con regularidad a sus familiares en la Isla, siendo el envío de dinero la manera más común de prestar ese apoyo. Cinco, la inserción de los cubanos a la sociedad poblana ha tenido sus dificultades. En sentido general, los isleños son abiertos, directos, expresivos o elocuentes, modales que son vistos por algunos poblanos como expresiones de grosería, pedantería o impertinencia. Seis, ya que esta emigración posee un fuerte componente académico o profesional, ella ha realizado importantes contribuciones al estado de Puebla, particularmente en áreas como la ciencia, la cultura y el deporte.

Hipótesis subsidiarias

Las hipótesis subsidiarias son las once siguientes:

1)- En algunos migrantes cubanos existe cierto temor o reservas al responder a las preguntas vinculadas con las motivaciones reales para salir de Cuba (así como para un futuro regreso a la Isla) o sobre los vínculos que mantiene con su lugar de origen. Existen distintos factores que explican sus posibles silencios a las preguntas o las respuestas formales que se emitan. Ante todo, por que ellos temen a represalias que pueda tomar el gobierno cubano. Y es que entre muchos cubanos existe un tipo de paranoia generalizada, en virtud de la cual se piensa que lo que se manifiesta a otra persona puede llegar a conocimiento del gobierno. ¿De qué tipo de represalias estamos hablando? Básicamente, de las cuatro siguientes: prohibición de la entrada a la Isla (donde tienen sus seres queridos), negación del permiso de entrada a México de algún familiar o amigo (algunos llevan años en estas gestiones, pues existen complicaciones tanto en Cuba como en México), pérdida de las propiedades que tienen en Cuba (básicamente su vivienda), pérdida de su salario cubano (algunos ya están jubilados, o en convenios siempre renovados, o de permisos temporales, pero siguen cobrando su mensualidad, pues siguen viviendo formalmente en Cuba). De algún modo, la política lo contamina todo. Como bien señalaba el escritor cubano Carlos Espinosa Domínguez “la maldita circunstancia de la política por todas partes”, parafraseando así el clásico verso del poeta cubano Heberto Padilla (“la maldita circunstancia del agua por todas partes”).

2)- Algunos migrantes cubanos pueden dar respuestas distintas a su situación económica real (en muchos, sino en todos, esta circunstancia influye en lo emocional). Para este grupo, la situación económica no le ha sido tan bien como esperaban, pero les cuesta admitir esa realidad y la disfrazan. La situación económica no solo incluye la situación actual (remuneración escasa, desempleo, falta de vivienda y de acceso a la salud) sino también la perspectiva futura (en particular, no tener jubilación garantizada). Para varios de estos migrantes, se les pasó la edad de irse para el Norte (vinieron de Cuba no siendo ya jóvenes o se hicieron adultos estando en Puebla y esperando que la situación mejorara).

3)- Puebla y, en general México, ha resultado un lugar de paso para los migrantes cubanos. Como no es posible apoyarse en las cifras del Instituto Nacional de Migración (no facilita la información requerida, pero, sobre todo, la sub numeración es enorme, ya que los cubanos se marchan masivamente a los Estados Unidos y eso no siempre lo registra el Instituto), hay que intentar aproximaciones sobre la base de las opiniones de los propios encuestados. Por supuesto, estamos de acuerdo con que es algo muy subjetivo, pero acaso ¿las subjetividades compartidas no puede considerarse un tipo de objetividad? Se parte del supuesto de que el promedio de las estimaciones del conjunto de los encuestados sea algo más confiable que la estimación de una sola persona. Además, se impone el análisis posterior sobre los resultados alcanzados en la encuesta y establecer comparaciones con otros estudios que aborden situaciones semejantes.

4)- Existe una diferencia sustantiva entre los residentes cubanos en Puebla, la cual se vincula a la fecha de emigración (antes o después de principios de los noventa). Parece razonable el planteamiento de Pío E. Serrano que señala que la migración cubana puede verse como un tipo de pirámide ya que “a medida que el régimen se radicalizaba iba expulsando segmentos más amplios y populares de la población”. Habría que añadir que el régimen no solo se radicalizaba, sino también que, a partir de determinado momento, la situación económica se deterioraba. Así, las condiciones sociales en la Isla se agravaron drásticamente a principios de los noventa como resultado de la caída del bloque socialista y particularmente con el colapso de la Unión Soviética, país con la cual Cuba mantenía una relación muy estrecha. Este nuevo escenario contribuyó a que el gobierno cubano flexibilizara su política migratoria, la cual presenta diferencias con las décadas anteriores.

En efecto, los migrantes de las décadas anteriores (sesenta, setenta y ochenta) salían de la Isla con una única certidumbre: no habría nunca regreso. No resulta fácil abandonar el lugar donde se nació y se creció y, sobre todo, donde se deja a sus seres más queridos, pero tiene que cumplirse con las reglas del juego: te dejamos salir a condición de que nunca regreses. Por otra parte, la persona que decidía marcharse del país, perdía todas sus propiedades (casa, coche, cuenta bancaria, etc.). Esta situación hacía que la migración cubana presentara características sui géneris a otras migraciones. Los migrantes cubanos podían mandar dinero y paquetes (con lo cual ayudaban a sus familias y se beneficiaba a la economía del país) pero nunca regresar. Ya en los noventa (por las razones antes mencionadas) la rigidez o inflexibilidad de las normativas migratorias sufrieron cambios y se podía salir de la Isla (y también regresar) por distintos motivos: matrimonios, intercambios, convenios de trabajo, invitaciones personales, etc. Es por ello que la mayoría de los cubanos residentes en Puebla (quienes emigraron en los noventa) han podido visitar la Isla y muchos lo hacen una o dos veces al año.

5)- En cuanto a las causas de la migración (si es básicamente económica o política) se impone el análisis a los resultados obtenidos. En muchos casos, las percepciones de los migrantes sobre ellos mismos pueden ser diferentes a la realidad (estiman que la Política no tiene ninguna injerencia). Pero, además de sus percepciones, está presente el temor de los encuestados al cual antes nos referimos. En efecto, el triunfo de la Revolución Cubana en 1959 posibilitó el inicio de un proceso de medidas sociales que benefició a la mayoría de la población. Por otra parte, hizo a los cubanos nuevos ciudadanos del mundo. Pero con el devenir del tiempo, la Economía, (como alguien expresó es un tipo de Bella Dama que no perdona) convirtió a una parte de los ciudadanos cubanos en emigrados, quienes, a su vez, debían de sostener directamente a los familiares que se quedaron en la Isla e, indirectamente, al resto de la población cubana. Ironía de la historia. Pero a la Economía (cual caballo salvaje) debe ponérsele freno. Así la Política es un tipo de jinete que intenta domar a la Economía. Generalmente la primera no logra dominar completamente a la segunda y ello ayuda a explicar las olas migratorias.

Por nuestra parte, se conjetura que en esta migración cubana, como en muchas otras en el mundo, los dos componentes están presentes: el económico y el político. Por supuesto, el económico es el más visible (la precaria economía obliga a buscar una mejor vida en el extranjero que sirva, además, para ayudar a las personas que dependen de uno). Pero el factor político está tan oculto como actuante: las políticas públicas adoptadas en el país favorecen o estimulan el éxodo o diáspora. Intentar responder el por qué de los fenómenos resulta más gratificante que sólo responder al qué o al cómo. Esta crítica es válida no sólo para el caso cubano, sino para todos los otros casos (como el mexicano).

6)- El hecho de que los cubanos residan en Puebla, y no en otro lugar, atiende más al azar que al cálculo. Existen distintas circunstancias civiles (matrimonios, convenios laborales, invitaciones personales, etc.) que llevan, a la larga, a cambiar de un país a otro. La mayor parte de los cubanos no se propusieron a Puebla como destino. Puede decirse que Puebla no era lo deseable, era lo posible, lo que el azar o casualidad te permitía. Desde luego, el azar posee sus condicionantes. Por eso, el poeta cubano Lezama Lima hablaba del “azar concurrente” (donde concurren o intervienen diversos factores). El azar no es totalmente azaroso. Un simple ejemplo: el hecho de que la universidad pública del estado (BUAP) haya mantenido vínculos académicos con universidades cubanas desde fines de los años sesenta (lo que a su vez refleja la presencia de la ideología de izquierda en las autoridades universitarias poblanas) hizo posible que distintos profesores o investigadores de la Isla visitaran la ciudad angelopolitana. Los cubanos que colaboraban debían tener dos condiciones básicas: capacidad intelectual y fidelidad ideológica. Como había muchos que cumplían la capacidad intelectual, entonces el corte se hacía por lo ideológico. Por aquellos tiempos, se requería que fuesen, principalmente, militantes del Partido Comunista de Cuba (PCC) o de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC).

Luego, no cualquiera podía viajar a México, ni a cualquier estado de la república mexicana (sino, sobre todo, a las universidades con una larga tradición de izquierda como Puebla, Oaxaca, Guerrero, D.F, etc.). En cuanto a los académicos cubanos, si por regla general la capacidad intelectual estaba fuera de discusión, no resultaba de igual modo la fidelidad ideológica. Para algunos funcionarios o profesores de la universidad pública de Puebla (por entonces, UAP) resultaba paradójico que algunos de los profesores cubanos no quisieran regresar al término de sus contratos o, lo que es peor, empezaran a cuestionar al régimen de La Habana. Los supuestos representantes de la Revolución Cubana se convertían en sus críticos. La paradoja resulta perfectamente explicable: los profesores cubanos, ya con una estabilidad laboral en el mercado poblano (algunos se casaron y tuvieron hijos, lo que los afincaba más a esta ciudad), podían expresar libremente sus opiniones y tomar una decisión que cambió sus vidas y, a la postre, la de su entorno.

7)- La inserción de los cubanos a la sociedad poblana ha tenido sus dificultades. En sentido general, los isleños son abiertos, directos, expresivos o elocuentes, modales que son vistos por algunos poblanos como expresiones de grosería, pedantería o impertinencia. En el plano familiar, la parentela del esposo(a) poblano(a) considera, en muchas ocasiones, al esposo(a) cubano(a) como vividor o aprovechado que se ha casado por puro interés material. En esta percepción negativa sobre los cubanos influyen distintas causas, al menos, tres: la animosidad u hostilidad de algunos sobre los extranjeros (sin importar del lugar de donde sean), los “malos ejemplos” de ciertos cubanos que se han casado con extranjeros como modo de abandonar su país (la noticia de estos casos se extiende rápida y masivamente) y los medios de comunicación, en especial de la televisión mexicana que ha hecho un gran escándalo (o al, menos difundido imágenes negativas ) sobre actores cubanos en México (en particular, la vedette Niurka Marcos y el actor Francisco Gattorno). A la inversa, una buena parte de los cubanos, especialmente los que llevan algunos años de radicar en Puebla, ven a los poblanos como muy fríos o poco expresivos y estiman que la cortesía y religiosidad poblanas son puramente formales, razón por la cual algunos consideran estas prácticas de simple hipocresía. Para muchos cubanos, en la familia poblana (especialmente entre hermanos, sobrinos y primos) no existe la unión que caracterizaba a su familia en Cuba. Las reuniones decembrinas (con motivo de la Nochebuena o del fin de año) son un tipo de ritualidad que esconde el interés real por la salud o suerte de los invitados. Para estos cubanos, abrazos y palmaditas en la espalda en una noche no pueden sustituir al abandono o falta de preocupación familiar durante todo el año. Esta percepción cubana sobre los poblanos viene dada por las costumbres o tradiciones conformadas en la isla antillana. Luego, para lo que los poblanos ven como algo normal para ciertos cubanos no lo es tanto. El acto de comparar (y compararse) resulta ineludible. Estas visiones distintas han traído dificultades en la vida conyugal y ha sido una de las causales del divorcio, tema éste que podría ser objeto de otra investigación

En el plano laboral, los cubanos que ocupan distintos puestos o responsabilidades son rechazados por una parte de sus colegas poblanos que estiman que esas plazas deberían ser ocupadas por mexicanos, máxime en una situación de crisis económica mundial. En dicho rechazo, además del hecho de no haber nacido en el país, intervienen factores como el modo de ser o de pensar políticamente de los cubanos.

8)- La emigración cubana en Puebla se encuentra disgregada o dispersa, no está agrupada geográficamente como otros emigrados cubanos en Estados Unidos (el modelo sería Miami). Esta situación provoca una paradoja interesante en relación con la convivencia comunitaria. Mientras que en Cuba los vecinos tienen mucha comunicación entre sí (como resultado tanto de la idiosincrasia como de las organizaciones creadas por el proceso revolucionario como los Comités de Defensa de la Revolución, CDR, y la Federación de Mujeres Cubanas, FMC, las cuales reúnen a los vecinos periódicamente para informar acerca de diversos asuntos), en Puebla esa comunicación no existe, especialmente en las colonias o fraccionamientos de sectores medios o altos. Muchas veces no se conocen a los vecinos más próximos. La mayoría de los cubanos entrevistados sienten nostalgia por la convivencia cubana, pero otros dos grupos poseen concepciones diferentes. Uno de estos grupos rechaza tanto la falta de privacidad familiar en el ambiente cubano como la falta de solidaridad vecinal en la sociedad poblana. Serían, para ellos, los dos extremos negativos o cuestionables del asunto. Pero existe otro grupo de cubanos que, agobiados por la intervención de las organizaciones cubanas antes mencionadas en la vida privada, prefieren el aislacionismo o individualismo característicos de la sociedad poblana para así no ser molestados. El extremo de la experiencia cubana lleva a preferir el extremo de la experiencia angelopolitana. Estos diferentes modos de pensar son lógicos o comprensibles pues indican la complejidad o heterogeneidad de cualquier grupo humano, no importa que sean de la misma raza o nación y nos recuerdan que las unanimidades u homogeneidades son incompatibles o extrañas a los conjuntos humanos.

9)- Resulta significativo que una emigración tan relativamente pequeña haya dejado una huella especial en el estado. Dado el fuerte componente académico o profesional de dicha emigración (tanto de los que aquí residen como de los que regresaron a la Isla después de cumplir sus convenios laborales) resulta lógico que haya dejado marcas o trazos en distintas áreas o zonas. Entre estas últimas, debe mencionarse, el deporte, la ciencia, las artes, el teatro, la música y la educación. Por supuesto, la mayoría de estas contribuciones han sido realizadas desde la docencia, profesión que les ha permitido recibir el sustento económico. Tampoco puede desconocerse el aporte de aquellos cubanos que, desde el ámbito popular, se han destacado en promover las costumbres cubanas en la ciudad. Espacios como El Mojito en San Pedro Cholula, Aché, La Cabañita Cubana y El Son Montuno en la ciudad de Puebla dan testimonios de esta última cuestión.

10)- El concepto de Patria ya no es homogéneo para todos los migrantes cubanos. Mientras para algunos, la Patria significa todavía el lugar en que se ha nacido, para otros representa la familia y los amigos o, incluso, la nueva tierra adoptiva. En algunos, los de mayor edad, los llamados símbolos patrios (himno, bandera y escudo) les recuerda su patria de origen, pero a otros (los más jóvenes) no les dice mucho.

11)- Se postula que si bien las nuevas condiciones (desde las comidas hasta el lenguaje) han impactado la identidad o cubanidad (sentirse y actuar como la mayoría de los cubanos), no existe “descubanización” sino más bien una “cubanización enriquecida”. Es imposible mantenerse “puro” en un contexto diferente. Además, debe entenderse que los propios cubanos en la Isla van enriqueciendo sus costumbres, pues la cultura es un proceso dinámico. Los cubanos que viajan de visita a la Isla, ya no la encuentran como la dejaron. Y es que se ha producido un doble cambio: tanto en la tierra visitada como en los propios visitantes.

Finalmente, observemos que el estudio de una comunidad del exterior contribuye no sólo a la mejor comprensión de ese grupo, sino también a la mejor comprensión del lugar donde se encuentra o reside. Como antes se ha dicho, las hipótesis anteriores deben ser refirmadas o rectificadas por el proceso investigativo, siempre que se usen los instrumentos de investigación correspondientes y, sobre todo, los análisis o enjuiciamientos pertinentes. Así como los árboles impiden ver el bosque, los datos, sin las reflexiones, disfrazan, enmascaran o, simplemente, empobrecen la realidad. Que así no sea.

Puebla, diciembre de 2010



[1] Aprovecho para dejar constancia de mi agradecimiento a distintos investigadores que revisaron los instrumentos e hicieron diferentes observaciones o sugerencias. En primer lugar, al doctor Benito Ramírez Valverde del Colegio de Posgraduados de Puebla. Asimismo, a los doctores Pedro Juárez y Roberto García Pereyra de la institución antes mencionada y al buen amigo Víctor Manuel Reynoso Angulo (del Departamento de Relaciones Internacionales de la UDLAP). A todos ellos, muchas gracias.

[2] Véase al respecto los ensayos siguientes: de Ernesto Rodríguez Chávez titulado “Notas sobre la identidad cubana en su relación con la diáspora”, en, Temas (Cuba), n.28, enero-marzo de 2002 y de Miren Uriarte “Los cubanos en su contexto: teorías y debates sobre la inmigración cubana en los EE.UU., en, Temas (Cuba), n.2, abril-junio de 1995.

[3] Por suerte, el INEGI sí posee esa información en base de datos particulares, ya que el cuestionario básico precisa tanto el país que nació la persona censada como el lugar donde vivía cinco años antes de la fecha del censo. Esta información debe solicitarse de modo institucional al INEGI, y no a título personal. Por otra parte, los resultados del Censo de Población y Viviendas del 2010 serán publicados a principios del 2011 y ya se podrán comparar con las cifras anteriores.

[4] En el caso del Directorio Telefónico tenemos que la Sección Amarilla incluye los centros o servicios “globalizadores”, mientras que la llamada Sección Blanca (nombres de los suscriptores) incluye numerosos apellidos que denotan la procedencia extranjera. Por cierto, estos repertorios telefónicos, a la vez que arroja distintas pistas para la investigación, también pueden devenir objeto de estudio para las ciencias sociales.

[5] Por cierto, los propios “símbolos” de la identidad poblana denotan componentes foráneos (por supuesto, ya asimilados a través de los años). ¿Acaso la China poblana, antes de ser poblana no fue asiática? ¿El 5 de Mayo sería posible sin la presencia de tropas europeas?

jueves, 27 de enero de 2011

LA VIDA COMO VENGA

LA VIDA COMO VENGA

LETRA: LUIS ÁNGEL ARGÜELLES ESPINOSA

MÚSICA:

ESTEMOS OCUPADOS

NO ESTEMOS PREOCUPADOS

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA CUBITA

ALLÁ TENGO A MAMITA

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA LA HABANA

ALLÁ TENGO A MI HERMANA

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA PINAR

ALLÁ TENGO A PILAR

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA ARTEMISA

ALLÁ TENGO A ELISA

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA MAYABEQUE

ALLÁ GASTO MI CHEQUE

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA MATANZAS

ALLÁ TENGO A ESPERANZA

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA CIENFUEGOS

ALLÁ HAGO MIS RUEGOS

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA VILLA CLARA

ALLÁ YO ESTOY CON CLARA

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA SANCTI SPÍRITUS

ALLÁ VIBRA MI ESPÍRITU

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA MI CIEGO

ALLÁ YO VEO A DIEGO

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA CAMAGÜEY

ALLÁ YO NO SOY GUEY

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA LAS TUNAS

ALLÁ ES MI MERA CUNA

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA MI GRANMA

ALLÁ SOY COMO BATMAN

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA MI HOLGUÍN

ALLÁ NO HAY PILLÍN

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA SANTIAGO

ALLÁ VISITO A DIAGO

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA GUANTÁNAMO

ALLÁ LEVANTÓ EL ÁNIMO

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA LA ISLA

ALLÁ NADIE SE AÍSLA

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA MORÓN

ALLÁ NO SOY MOLÓN

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA BAYAMO

ALLÁ ES LO QUE AMO

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA VARADERO

ALLÁ ES MI PARADERO

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA VIÑALES

ALLÁ NO HAY VIVALES

LA VIDA COMO VENGA

TENGA YO O NO TENGA

-----------------------------------

ME VOY PARA BARACOA

ALLÁ COMO COCOA

LA VIDA COMO VENGA

VENGA DE DONDE VENGA

(SE ACABÓ LA SALSA, SEÑORES… Y EL DINERO TAMBIÉN)

PUEBLITA LA BELLA (GUAGUANCÓ)

PUEBLITA, LA BELLA

LETRA: LUIS ÁNGEL ARGÜELLES ESPINOSA

MÚSICA:

A PUEBLA LLEGUÉ YO UN DÍA

BUSCANDO NUEVO HORIZONTE

ME CREYERON POLIZONTE

ME RESCATÓ LUCHA MI TÍA

(CORO)

¡OH, PUEBLITA, LA BELLA

CON SUS CUATES Y SUS MANOS

Y AQUÍ SE MUERE UN CUBANO

PORQUE EL HAMBRE LO ATROPELLA (¡QUÉ BELLA)

EMPECÉ PRONTO A CHAMBEAR

CONTÉ CON MIS INFLUENCIAS

ME OPUSIERON RESITENCIA

Y TUVE QUE RENUNCIAR

(CORO)

¡OH, PUEBLITA, LA BELLA

CON SUS CUATES Y SUS MANOS

Y AQUÍ SE MUERE UN CUBANO

PORQUE EL HAMBRE LO ATROPELLA (¡QUÉ BELLA!)

CONSEGUÍ MI PROPIA CHAMBA

VENDIENDO TORTAS CUBANAS

ASÍ TRAJE YO A MI HERMANA

Y PUDE BAILAR MI BAMBA

(CORO)

¡OH, PUEBLITA, LA BELLA

CON SUS CUATES Y SUS MANOS

Y AQUÍ SE MUERE UN CUBANO

PORQUE EL HAMBRE LO ATROPELLA (¡QUÉ BELLA)

ME QUITARON EL TRABAJO

YO NO SÉ QUE VOY A HACER

ME PREOCUPA EL COMER

AUNQUE SEA PAN CON AJO.

(CORO)

¡OH, PUEBLITA, LA BELLA

CON SUS CUATES Y SUS MANOS

Y AQUÍ SE MUERE UN CUBANO

PORQUE EL HAMBRE LO ATROPELLA (¡QUÉ BELLA!)

PIENSO CRUZAR LA FRONTERA

BUSCANDO OPORTUNIDADES

CONOCER YO OTRAS VERDADES

Y CHAMBEAR COMO PANTERA

(CORO)

¡OH, PUEBLITA, LA BELLA

CON SUS CUATES Y SUS MANOS

Y AQUÍ SE MUERE UN CUBANO

PORQUE EL HAMBRE LO ATROPELLA (¡QUÉ BELLA!)

MI FAMILIA DE LA HABANA

ESPERA INVITACIONES

DESCONOCE SITUACIONES

Y SE ME ACABÓ LA LANA

(CORO)

¡OH, PUEBLITA, LA BELLA

CON SUS CUATES Y SUS MANOS

Y AQUÍ SE MUERE UN CUBANO

PORQUE EL HAMBRE LO ATROPELLA(¡QUÉ BELLA!)

Y CON ESTA ME DESPIDO

YA TIENEN INFORMACIÓN

ESPERO COOPERACIÓN

ES ALGO QUE SE LOS PIDO.

(CORO)

¡OH, PUEBLITA, LA BELLA

CON SUS CUATES Y SUS MANOS

Y AQUÍ SE MUERE UN CUBANO

PORQUE EL HAMBRE LO ATROPELLA (¡QUÉ BELLA!)